En el numero 39 de Cadena de Suministro, de noviembre de 2023, escribí un artículo con este mismo título que enumeraba los problemas que presentaba el borrador del Reglamento de Seguridad Contra Incendios en Establecimientos Industriales con respecto a las naves modulares.
El artículo acababa diciendo: “Sólo hay que ser conscientes del problema para poder buscar las soluciones. Esperemos que entre todos lo podamos conseguir”.
Y afortunadamente para todos, podemos avanzar que ese ejercicio de consciencia ya se llevó a cabo, y estamos en el buen camino para “conseguir” las “soluciones” al “problema” (entrecomillo las palabras que eran clave en esa frase)
Desde entonces la publicación del artículo, casi seguro por casualidad, y algo por la labor “divulgativa” que veníamos haciendo desde APPUNLE, los asociados fueron conscientes de la gravedad del problema. Como se decía en el artículo, “quedan (quedaban) proscritas todas las naves modulares, presentes y futuras”.
Y esa “consciencia” se fue extendiendo por diferentes despachos hasta “llegar” de nuevo a los despachos ministeriales en los que, seguramente por alguna cuestión aportada de forma “novedosa”, se fue consciente de la gravedad del problema y se estableció un cauce de solución, que, a día de hoy, está dando frutos.
No podemos decir que todo el problema este solucionado desde el punto de vista de APPUNLE, pero tenemos que reconocer que hemos llegado entre las dos partes a muchos puntos de acuerdo y a falta de alguna cuestión, aun importante, podemos ser muy optimistas al respecto.
Mientras duren las negociaciones de los flecos no podemos dar detalles en un artículo de prensa, pero sí podemos decir, y en alto (o en negrita), que el espíritu de colaboración entre Ministerio de Industria y APPUNLE, que pedíamos en el artículo antes mencionado, ha llegado y esperemos que se mantenga siempre. APPUNLE nació para esto y es su principal motivo de existencia.
Podemos avanzar que las naves modulares, existentes y futuras podrán ser viables técnica y económicamente lo que indudablemente es una muy buena noticia para el sector inmologístico.”
Pero no vamos a terminar el artículo sin avanzar que las naves modulares, existentes y futuras podrán ser viables técnica y económicamente lo que indudablemente es una muy buena noticia para todos los Promotores, Propietarios y Usuarios de las mismas.
Y de esta forma se justifica que el título de este artículo tenga puesto “y II” que indica que confiamos plenamente en que ya no tendremos que volver a escribir sobre el asunto del “RSCIEI y las naves modulares”. Es la “y” de la confianza.