En las cadenas de mercancía hay un elemento clave que no puede faltar en ningún almacén y que facilita la vida de los trabajadores en el momento de transportar multitud de cargas. Se trata de los palets, el soporte o plataforma destinado a servir de contrapeso para cualquier tipo de carga y permitir moverla de una manera eficiente y segura.
En este sentido, el mercado ofrece diferentes tipos de palets y, aunque el de madera es el más conocido por su uso durante largos años, los palets de plástico cada vez van ganando más terreno en las cadenas de almacenamiento.
Esta es una decisión que depende de las capacidades logísticas de cada compañía, perolos palets de plástico cada vez son más populares por su capacidad para ofrecer una mayor versatilidad y comodidad en el momento de transportar las cargas.
En los últimos años se han destacado como la opción preferida frente a los palets de madera por un almacenamiento y transporte de mercancías seguro, rentable y sostenible. Estos son los principales motivos que han llevado a grandes empresas a realizar el cambio.
Principales diferencias entre un palet de madera y un palet de plástico
En el momento de escoger un palet de madera y un palet de plástico hay que valorar diversos aspectos que definen a cada tipo de material. Desde el peso, pasando por la sostenibilidad y la higiene, la elección es clave para la logística de la cadena de almacenamiento y el proceder de sus trabajadores.
- Material de fabricación. Evidentemente, el material es la primera gran diferencia que existe entre los dos tipos de palets. Mientras que los de madera están elaborados con maderas específicas de pinos o abetos para apostar por su frondosidad, los palets de plástico están fabricados con polietileno de alta densidad (HDPE), un tipo de plástico que no absorbe la humedad.
- Peso y capacidad de carga. El transporte de los palets también es esencial para su utilidad en los almacenes, por lo que la diferencia de peso es notable: mientras que los palets de madera rondan unos 25 kg por unidad, los de plástico son más ligeros, llegando a pesar unos 15 kg, más fáciles de manipular.
Por su parte, los palets de madera tienen la capacidad de soportar hasta 1.500 kg en las estanterías y, en el suelo, sin moverse, hasta 4.000 kg; los palets de plástico, en cambio, soportan menos carga en estanterías, unos 1250 kg, pero pueden alcanzar los 8000 kg situados en el suelo.
Por su parte, los palets de madera tienen la capacidad de soportar hasta 1.000 kg en las estanterías y, en el suelo, sin moverse, hasta 4.000 kg; los palets de plástico, en cambio, soportan en estanterías, hasta 1.500 kg, y pueden alcanzar los 8000 kg en carga estática.
- Durablidad. En relación con la durabilidad, los palets de plástico son mucho más eficientes, ya que el material no se deteriora con facilidad y su mantenimiento y limpieza son realmente sencillos. Los palets de madera, sin embargo, tienen el riesgo de la aparición de hongos y bacterias con la exposición al agua, por lo que se exponen a un deterioro mayor.
- Seguridad y manejo. Por último, en cuanto a seguridad y manejo, los palets de plástico son más fáciles de transportar apilados, uno de los grandes hándicaps de los palets de madera.
Además, estos últimos han de cumplir con la normativa fitosanitaria europea (NIMF-15) que regula el uso y envío de los palets para su utilización en el comercio internacional y estar regulados por la norma EN 13698-1 para la desinfección de la madera, algo ante lo que los palets de plástico están exentos.
En todos estos aspectos es importante realizar comparativas en portales como Cabka donde puedes encontrar un amplio catálogo para disponer de los mejores palets del mercado.