A juicio de UGT, "la nueva Directiva Rider europea supone un punto de inflexión para las personas trabajadoras de plataformas digitales".
Sin embargo, al mismo tiempo, la central sindical también defiende que los dos años para que se aplique constituyen "un período de adaptación excesivamente largo", por lo que insta "su estricto cumplimiento con la menor demora posible, apoyándose siempre en un fluido ejercicio del diálogo social y la negociación colectiva".
Así mismo, el sindicato también destaca como aspectos más relevantes de la norma, por un lado, que "amplía su radio de acción a cualquier plataforma digital, sea de reparto a domicilio o de cualquier otra índole. Así, se incluyen sectores como el del transporte (Uber o Cabify); el de ayuda y cuidados a domicilio (Cuideo, Cuidum); el de alquiler de recursos freelance (Mechanical Turk, Monster, Upwork); el de hostelería (Hosteleo); el de creación de contenidos (Lowpost); el de relaciones académicas (SuperProf) y un larguísimo etcétera de plataformas, actuales o por aparecer".
Así mismo, UGT, por otra parte, también resalta "la profundidad regulatoria de la nueva norma, que eleva exponencialmente las exigencias de transparencia y vigilancia, multiplica las garantías ante decisiones arbitrarias o inexplicables", algo que, según su criterio, "conllevará el fin de una época de inexplicables abusos y desmanes".