
La patronal UNO ha propuesto en la reunión que ha celebrado el Comité Nacional del Transporte por Carretera esta semana que se solicite al Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible que la figura del gasóleo profesional se extienda al transporte ligero.
De esta manera, se pretende hacer frente a la posible subida de los impuestos que gravan el consumo del diésel en diez céntimos por litro de gasóleo anunciada por el Ejecutivo y en la misma estela de lo reclamado recientemente también por Fendismer.
Según los cálculos de la patronal logística, alrededor del 30% del total de las empresas de transporte realiza su actividad con vehículos de menos de 7,5 toneladas, por lo que "no ofrecer ayuda a esta otra actividad de la cadena de suministro estaría totalmente injustificado y pondría en riesgo la viabilidad de multitud de pymes, que no podrán hacer frente a este nuevo incremento fiscal del Ministerio de Hacienda, perdiendo competitividad y poniendo en riesgo miles de puestos de trabajo”.
En esta línea, la entidad considera "inaceptable que el transporte de mercancías con vehículos ligeros, conformado en un 80% por pymes y autónomos, sea quien deba cargar con el coste de la transición energética".
Así mismo, para UNO este incremento de los impuestos de los combustibles supone un ataque a "la viabilidad de muchas pequeñas empresas”.