El panorama de las entrega B2B en 2024 refleja las complejidades de un entorno económico difícil, en el que las pymes siguen sorteando las secuelas de diversas crisis y se enfrentan a importantes tensiones y retos financieros.
Dado que los flujos B2B representan alrededor del 45% del mercado europeo de correo urgente y paquetería, la dinámica de este segmento es crucial para los operadores logísticos, que deben garantizar unos servicios de entrega fiables y flexibles.
Según un reciente estudio de Geopost, el 86% de las pymes considera que las entregas son esenciales para el éxito de su actividad, y el 44% subraya que el impacto de unos buenos servicios de entrega en su negocio es muy alto. De hecho, una entrega fallida puede acarrear pérdidas económicas, dañar su reputación y, en el caso de que se trate de grandes empresas, afectar a toda la cadena de suministro.
En consecuencia, las entregas son una de las principales preocupaciones de las empresas, lo que influye en gran medida a la hora de elegir un proveedor. El 27%, por ejemplo, considera que es preciso que el transportista sea de confianza, y si bien las pymes rara vez consiguen elegirlo, el 58% de los encuestados desearía poder hacerlo.
Además, dado que las pymes reciben una media de 40 paquetes al mes de proveedores locales, las entregas deben ser fiables. La seguridad en la manipulación y la rapidez en la resolución de problemas se consideran requisitos imprescindibles, seguidos de la capacidad de hacer un seguimiento de los paquetes y de que se entreguen a tiempo.
En conjunto, tanto las pymes como las grandes empresas valoran el cumplimiento de las expectativas iniciales. Por ello, para el 75% de las empresas disponer de sistemas de seguimiento fiables es esencial, y conocer al conductor de la entrega también es importante para el 77%.
Margen de mejora
Así las cosas, las pymes se muestran en general satisfechas con los procesos de entrega y devolución, pero hay margen para desarrollar experiencias más impactantes y altamente satisfactorias, ajustándose a sus expectativas. Los operadores deberían, en este sentido, pensar en ofrecer un servicio de atención al cliente mejor y más humano, así como sistemas de seguimiento optimizados.
Por otro lado, la contratación transfronteriza se ha disparado, pues el 72% de las pymes encuestadas han declarado que se abastecen de productos en el extranjero, principalmente en Europa. Esta perspectiva internacional conlleva algunos retos, que pasan por la rapidez en las entregas, la eficacia de los sistemas de seguimiento y la mejora de la calidad de los servicios al cliente.
En este sentido, aunque las empresas están satisfechas con las entregas internacionales, aún hay margen de mejora, ya que el 40% de las pymes encuestadas se muestran "algo satisfechas". En cuanto a las entregas nacionales, los transportistas y las empresas de logística deben aprovechar la oportunidad para ofrecer servicios de entrega más fiables y predecibles.