Madrid, Cataluña y Andalucía son las tres regiones españolas más competitivas a nivel logístico, según el ‘I Informe de la Competitividad Logística de España y sus Comunidades Autónomas’ elaborado por UNO para que se conozca la verdadera dimensión de este sector, así como las palancas a desarrollar para seguir creciendo.
Según el estudio, presentado durante la jornada ‘Gestión excelente en logística y transporte’ celebrada en Sevilla, la primera posición la ocupa la Comunidad de Madrid, porque cuentacon un importante tejido productivo, una buena tasa de actividad, infraestructuras competitivas, una buena posición geoestratégica y una política fiscal favorable a la inversión. El precio del suelo constituye, por el contrario, el mayor hándicap.
Cataluña, por su parte, alcanza la segunda posición gracias a un tejido productivo fuerte y al puerto de Barcelona. Sus dos grandes desventajas a nivel logístico son la falta de suelo y su coste, con precios de hasta 700 euros/m2, además de ser la región que mayor presión fiscal ejerce sobre las empresas.
En tercera posición se sitúaAndalucía, por su conexión con los principales puertos marítimos y su proximidad a África, donde cerca del 90% del comercio se realiza por mar. También dispone de una gran red de carreteras e infraestructuras marítimas de relevancia, como el puerto de Algeciras. Su densidad de población, sus 64.355 empresas logísticas y los diez nodos logísticos repartidos por el territorio son otros importantes atractivos.
En el lado negativo, no cuenta con capacidad para el transporte aéreo de mercancías, y ha mantenido históricamente una elevada presión fiscal sobre las empresas, aunque en los últimos tiempos viene registrando un marcado descenso, según explican desde la patronal..
Tras estas tres autonomías, les siguen en el ranking de competitividad, por este orden, Aragón, País Vasco, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana, Castilla y León, Galicia, Murcia, Canarias, Navarra, Asturias, Baleares, La Rioja, Cantabria, Ceuta y Melilla, y Extremadura.
A juicio de Francisco Aranda, presidente de UNO, el estudio “constata el enorme potencial logístico de España y de sus Comunidades Autónomas, que surge como resultado de una combinación de factores geográficos estratégicos, magníficas infraestructuras aún por explotar, un conglomerado de puertos y aeropuertos de calado internacional, empresas a la vanguardia de la innovación y un capital humano muy cualificado”.
