
La Asociación de Cargadores de España ha participado esta semana en una reunión convocada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, junto a otros representantes del tejido industrial, para analizar las consecuencias de la entrada en vigor de los nuevos aranceles impuestos por los Estados Unidos.
En el encuentro, Carlos Castán, presidente de ACE, ha manifestado que "los aranceles impuestos por los Estados Unidos pueden generar un impacto severo en los flujos comerciales y en la competitividad de las empresas españolas".
En esta misma línea, la entidad advierte de que la imposición de estos aranceles podría provocar un aumento significativo de los costes logísticos y la modificación de las actuales rutas comerciales, lo que afectaría tanto a los importadores como a los exportadores españoles.
Además, según su criterio, el riesgo de un desvío masivo de mercancías hacia otros destinos podría generar un desequilibrio en la cadena de suministro y colapsar infraestructuras logísticas.
Dada la gravedad de la situación y de sus efectos negativos sobre el comercio internacional, los cargadores hacen un llamamiento a los gobiernos para "establecer acuerdos que permitan estabilizar las cadenas de suministro y evitar sobrecostes que acaben perjudicando a los consumidores finales".