La constante evolución que se registra en la distribución urbana de mercancías centró los últimos debates de LoginREAL'23, el evento de referencia del sector logístico español que organiza anualmente Cadena de Suministro, tras la ponencia inicial de Sara Hernández, de Deloitte.
En este sentido, la mesa redonda que giró en torno a las nuevas necesidades inmologísticas que plantea la distribución urbanade mercancías estuvo moderada por Jesús Lacasia, asesor inmobiliario del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canles y Puertos, consejero de Grupo Gran Europa y secretario general de Appunle, y contó con la participación de Sara Hernández del Olmo, de Deloitte, Alberto Larrazábal, de CBRE, Manuel Molins, de CTT Express, Daniel Latorre, de CityLogin, Ramón García, del Centro Español de Logística, y Javier Guerrero, del Grupo Mahou San Miguel.
Este grupo de profesionales coincide en que, tras una etapa de fuerte expansión durante la crisis sanitaria, parece que el comercio electrónico ha aminorado su ritmo de crecimiento y que el consumo está regresando paulatinamente al canal físico, aunque, por otro lado, los consumidores parecen más abiertos a experiencias omnicanales en las que se mezcla el acudir a las tiendas, bien para comprar o para recoger pedidos con la comparación de precios a través de internet.
Necesidades del reparto
Por un lado, Manuel Molins, de CTT Express, reflexionó sobre los volúmenes de flota necesarios realmente para llevar a cabo un reparto eficiente, así como sobre las limitaciones que afectan al tráfico de vehículos para la distribución en las ciudades. Según su criterio, "no tiene sentido limitar el reparto en las ciudades como tampoco lo tiene limitar la circulación de los autobuses".
Así mismo, Daniel Latorre, de CityLogin, también puso el foco en cómo se articula el consumo en grandes ciudades y en el gran volumen de devoluciones que genera el comercio electrónico tal y como está planteado actualmente. En su opinión, "el reparto no es gratuito nunca y hay que ver cómo se conciencia al consumidor" para conseguir una logística más eficiente, sostenible y rentable.
Para Alberto Larrazábal, de CBRE, lo más preocupante en el ámbito de la distribución urbana de mercancías es la gran dispersión normativa existente en cada municipio en relación con la actividad, así como la falta de renovación del parque de vehículos ligeros que realizan estos servicios. El profesional estima que "habría que buscar normativa más ordenada y cohesionada para que los operadores tengan algo a que agarrarse a la hora de realizar actividades de distribución urbana de mercancías".
Por otra parte, Sara Hernández del Olmo, de Deloitte, percibe que el comercio electrónico ha añadido una nueva "capa de complejidad" al reparto de mercancías en las ciudades, por lo que, según su opinión, "dependiendo de dónde se ponga el foco las respuestas más adecuadas para la distribución urbana de mercancías son distintas", abriendo el abanico a diferentes soluciones en función de las necesidades y la traza urbanística de cada ciudad.
Hubs y cambio del modelo de ciudad
A su vez, Ramón García, del Centro Español de Logística, aboga por un cambio radical de modelo en el reparto urbano de mercancías. En su opinión, "la sociedad no es consciente de la importancia que tiene la distribución urbana de mercancías", por lo que reclama que "es la ciudad la que se tiene que adaptar al reparto y no el reparto a la ciudad", algo imprescindible para que la actividad logística en las grandes ciudades sea eficiente y sostenible, tanto desde el punto de vista medioambiental, como desde el económico.
En esta misma línea, Javier Guerrero, del Grupo Mahou San Miguel, centró el debate en la importancia que tiene la distribución urbana para el segmento Horeca para asegurar que no existe un único modelo de reparto, ya que cada ciudad tiene sus propias circunstancias específicas. Según su criterio, "los hubs urbanos son una buena alternativa, pero son más caros. Dan servicio mejor, pero a coste superior", por lo que, en su opinión, en un futuro se van a desarrollar más soluciones para la distribución urbana.
En definitiva, la mesa redonda pide una mayor colaboración de los ayuntamientos para conseguir una comprensión completa del fenómeno que supone la distribución urbana de mercancías y de su importancia para la economía y la actividad de las ciudades. Solo así podrá conseguirse una mayor imbricación de la logística en el tejido urbano, con instalaciones y soluciones adecuadas para cada caso, que evite problemas de congestión y de servicio de manera adecuada y sostenible.