El puerto de Barcelona ha puesto en marcha un proyecto para instalar en la ZAL el parque fotovoltaico ubicado sobre cubierta más grande de Europa, con una capacidad proyectada de 40 MW.
Este plan, impulsado por Cilsa, la entidad gestora de ZAL Port, se llevará a cabo en diferentes fases y se espera que concluya en 2026, con una inversión estimada de 24 millones de euros.
La primera fase, con un coste de seis millones de euros, se ha iniciado con la instalación de un parque fotovoltaico en la nave que ocupa Decathlon, abarcando casi 91.700 m² y equipado con 19.846 paneles. Esta fase generará 8,2 megavatios de potencia pico y proporcionará ahorros significativos de emisiones de CO₂, equivalente a las emisiones anuales de 725 automóviles.
Tras la finalización de esta etapa, se planea expandir la instalación de paneles solares a otras naves de la ZAL en El Prat, seguido por la creación de infraestructuras para suministrar el 100% de la energía consumida en la ZAL Barcelona.
Cuando todas las fases estén completas, se espera que el parque genere 50.000 megavatios-hora (MWh) anuales de energía limpia, equivalente al consumo anual de 41.250 personas.
Aunque no hay un cronograma predeterminado, se anticipa que la primera nave, la de Decathlon, estará operativa en marzo de 2024, y el proyecto se completará, como se avanzaba en 2026, dependiendo de los acuerdos con los consumidores locales.
Desde el puerto de Barcelona se ha subrayado que estas inversiones no buscan únicamente un retorno económico, sino que tienen un enfoque ambiental.
De hecho, la distribución de la energía dentro de un radio de dos kilómetros añade un elemento de sostenibilidad al proyecto, cumpliendo con regulaciones que favorecen el consumo local de energía producida.