Renault desarrolla un nuevo concepto de furgón eléctrico

Renault desarrolla un nuevo concepto de furgón eléctrico centrado en la comodidad del conductor y reducir el coste total de propiedad con un diseño inteligente que simplifica el trabajo y permite un uso diario intensivo.

18/09/2024 a las 12:02 h
La unidad hace una apuesta atrevida por revolucionar el transporte urbano de mercancías.
La unidad hace una apuesta atrevida por revolucionar el transporte urbano de mercancías.

Renault ha desarrollado un nuevo concepto de furgón eléctrico que pone el foco en los conductores y que supone un avance de lo que producirá Flexis, la empresa conjunta de la marca francesa con Volvo Group y la naviera CMA CGM.

Diseñado para la ciudad, el prototipo Estafette Concept cuenta con 4,87 metros de largo y 1,92 metros de ancho, que le permiten aparcar en una plaza convencional con un radio de giro similar al de un utilitario urbano, pero con una altura de 2,59 metros, que ofrece la posibilidad de ponerse de pie en el interior para un desplazamiento fluido y cómodo entre el habitáculo y la zona de carga de 7,1 m3 de capacidad repartidos en cuatro estantes basculantes.

Así mismo, este concepto es el primer vehículo de Renault Group que se beneficia de una arquitectura electrónica SDV, Software Defined Vehicle, que abre la vía a una nueva generación de vehículos comerciales eléctricos inteligentes, evolutivos y modulares.

La unidad se ha equipado con puertas laterales correderas de fácil apertura y tiene un exterior caracterizado por líneas fluidas, lisas y sin la menor aspereza a excepción del reborde que realza la banda de la parrilla delantera, con una calandra muy esculpida y un parabrisas que ofrece visibilidad panorámica.

En este mismo sentido, la cabina de Estafette Concept está concebida para reducir el coste total de propiedad con un diseño inteligente que simplifica el trabajo y permite un uso diario intensivo.

En su interior, el salpicadero cuenta con un espacio tecnológico sin visera alrededor del volante, con una pantalla de siete pulgadas para el cuadro de instrumentos y una gran pantalla de doce pulgadas desplazada hacia la derecha pero orientada hacia el conductor. Este espacio se complementa con las pantallas que hacen las veces de espejos retrovisores a ambos lados del habitáculo.

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