La ITV es una responsabilidad social que atañe a cualquier vehículo y a su conductor. Sin embargo, el 30% de los camiones y el 50% de los vehículos comerciales se abstiene de acudir a una estación de ITV, ante la imposibilidad de pasarla.
Esto puede esconder peligros que aparentemente pasan desapercibidos, pero para muchos conductores es más rentable pagar la multa por no llevar la ITV en regla que el coste de la reparación.
En España, la sanción por no pasar la ITV son 200 euros y, si el vehículo está con ITV negativa son 500 euros, aunque con pronto pago, se quedan en la mitad. En Alemania, sin embargo, las sanciones son incrementales según el tiempo que lleva caducada la ITV, y conllevan la retirada de puntos.
Desde MasterRuta, la comunidad digital de Euromaster para el cuidado de autónomos y pequeñas flotas, han querido compartir también algunos de los peligros vistos en las inspecciones a camiones y comerciales que sí acuden a la inspección, a partir de datos e información facilitada por Aeca-ITV.
Entre ellos, una silla de terraza colocada como asiento de copiloto, un pedal atado con una cuerda a un neumático de una furgoneta o un asiento de autobús donde ya solo existe el respaldo, por citar algunos ejemplos de vehículos cuya inspección fue calificada como desfavorable.
En las inspecciones a camiones, los fallos más habituales suelen ser el frenado (27%), seguido de la iluminación (20%), y los neumáticos y suspensiones (13%). No obstante, se espera que las emisiones sean una causa ascendente en el futuro, dado el envejecimiento acelerado del parque de camiones, ya en casi 18 años.
Además, hay elementos que se están incorporando de forma obligatoria a los vehículos, como los ADAS, que serán otro de los puntos a revisar en los centros de ITV, si bien está pendiente el real decreto que regule cómo inspeccionarlos.
