Debido a la poca elasticidad en la oferta y la madurez que caracteriza al sector del almacenamiento frigorífico en España, este sector ha sido el último en notar la crisis económica que se ha experimentado en Europa durante los últimos años, pero también el último en salir de ella. “Tras años de datos sombríos y un ajuste más que importante, por fin, parece que las perspectivas se han confirmado como satisfactorias, con tendencia a ir recuperando y mejorar las cifras de los últimos años”.
Esta es, al menos, la lectura del ejercicio 2016 que hacen desde la Asociación de Explotaciones Frigoríficas, Logística y Distribución de España, Aldefe, la asociación de ámbito estatal que ha realizado durante los últimos siete años un seguimiento de la evolución del sector dentro de la economía general.
Por ello, y “aunque las tarifas todavía son lejanas a los años previos a la crisis”, la evolución del último ejercicio muestran un crecimiento y una mejoría que hace que este sector “se sienta optimista y con proyección”, indican desde la asociación.
Los estadísticas internas que Aldefe elabora en torno a cuatro parámetros significativos de la industria: ocupación de las instalaciones, manipulación de mercancía, plantilla y facturación, muestran que el sector está preparado para el aumento de los márgenes de beneficio de la mano de la recuperación paulatina de las tarifas.
El nivel de ocupación llama al optimismo
Para Aldefe, la ocupación es “la clave y la base de la actividad del sector del almacenamiento frigorífico”, estableciéndose como “el indicador más puro de la actividad frigorífica orientada al almacenaje a temperatura controlada de productos perecederos”.
[sumario]La ocupación es el indicador más puro de la actividad frigorífica orientada al almacenaje a temperatura controlada de productos perecederos.[/sumario]
Por ello, la ocupación media de 2016, del 80,75%, con una media del 82% en los dos últimos trimestres, suponen “una excelente noticia que permite una expectativas muy positivas en la actividad”, sobre todo teniendo en cuenta que se incrementa en 20 puntos el nivel que se llegó a experimentar durante la crisis.
El aumento de los servicios que las empresas del sector han ofrecido a sus clientes también ha dado sus frutos en este último ejercicio. Durante el último año se han manipulado en almacenes frigoríficos españoles un total de 6.029.626,90 toneladas, de las cuales casi la mitad, 2.894.220,91 toneladas, han sido manipuladas por las 45 empresas que analiza la asociación en su estudio.
La ocupación media de 2016, del 80,75%, con una media del 82% en los dos últimos trimestres, suponen “una excelente noticia.
Estas 45 empresas cuentan con 76 instalaciones que tienen una capacidad de 2.953.286 m³3, lo que representa el 48% de la capacidad del sector en España, un total de 6.152.679 m³.
El sector tiene una plantilla media de 32 trabajadores a cierre de 2016, lo que supone un 50% más que los 24 trabajadores de media que había en el año 2010. Junto al aumento de la actividad, para el crecimiento del empleo también ha sido clave estabilidad laboral proporcionada por el convenio colectivo estatal del sector firmado en 2015 y publicado en mayo de 2016, ya que “ha proporcionado los instrumentos necesarios para la consolidación de estas cifras y la mejora de la contratación en los años venideros”, apuntan desde la asociación.
En lo que respecta a la facturación, el sector ha ingresado 177.171.590,21 euros en 2016, de los cuáles más de 85 millones de euros han sido facturados por empresas que integran Aldefe.