El sello ‘e’, la primera certificación de excelencia específica para el sector de la Logística y Transporte existente en el mercado español, ha experimentado un fuerte impulso en 2014, en el que ha pasado de ser una iniciativa en ciernes a convertirse en una realidad que se va implantando paulatinamente entre los actores del sector.
El pasado mes de octubre marcó un antes y un después para el desarrollo del mismo, con la inscripción de la Fundación para la Excelencia en Logística y Transporte en el Registro de Fundaciones de Fomento.
Impulsada por las asociaciones empresariales que constituían el Consejo Regulador del sello ‘e’: UNO, Adigital, CEL y Citet; esta Fundación fue creada el 8 de mayo para promover dicha certificación.
Las mismas organizaciones nombraron, en noviembre de 2013, a Juan Ramón Rodríguez presidente del Consejo, quien también ocupa el mismo cargo en la Fundación.
Ahora, Rodríguez hace balance para cadenadesuministro.es de la primera etapa de desarrollo del sello ‘e’, que tiene su antecedente en el sello ‘lógica’, si bien aporta importantes novedades con respecto al mismo.
Motivaciones y principios
El sello ‘e’ nació con el objetivo de establecer un Código de Buenas Prácticas para todo el sector del transporte y la logística. La finalidad del mismo es ser un instrumento de ayuda que permita a las empresas mejorar sus procesos y operaciones, además de un marchamo que potencie la imagen del sector.
Sin embargo, esto no implica que cualquiera pueda obtener el sello, “queremos poner el listón muy alto, y cualquier empresa que pretenda obtener la certificación debe tenerlo en cuenta”, indica Rodríguez. Con este fin, las empresas certificadoras han establecido conjuntamente unos criterios comunes, que parten de una definición pormenorizada de las cuestiones a tener en cuenta por parte de la Fundación.
Así, en el momento en que cargadores asocien los términos sello ‘e’ y excelencia logística, contar con el mismo se convertirá en una ventaja competitiva. Por ello, aunque desde la Fundación se muestran prudentes ante la intención, señalada en un principio, de introducir a los cargadores en el sello, cuestión que ahora mismo se está analizando, si es cierto que para la organización es importante contar con la colaboración de asociaciones de empresas, que promuevan entre sus integrantes la necesidad de exigir a los operadores y partners el sello.
Por este motivo, uno de los objetivos de la organización a corto plazo es que las asociaciones empresariales se integren en el patronato de la Fundación, para lo que ya ha habido acercamientos con Anfac, la Federación Valenciana de Transporte, Setram, o Transcalit, en Cataluña.
La idea es establecer contactos con cargadores, fabricantes y, en definitiva, usuarios del sector, en los distintos puntos de la geografía española, para que el sello se expanda “como una gota de aceite”.
El impulso de Fomento
En el mismo sentido, el apoyo que la asociación ha recibido desde el Ministerio de Fomento durante 2014 también ha sido fundamental para el impulso del sello, trabajando conjuntamente ambos organismos en establecimiento de un Código de Buenas Prácticas que potencie la logística en España.
Con respecto a este punto, la ‘Estrategia Logística de España’, presentada por el Gobierno en noviembre de 2013, hablaba de elaborar un documento integrado e integral del sector, basado en principios de transparencia, respeto a la libre competencia, estándares de calidad y sostenibilidad, entre otros.
Así, el Ministerio también está interesado en establecer un reconocimiento para las empresas que operen con transparencia, honestidad y responsabilidad social, indicando en la presentación de la estrategia que se apoyaría la consolidación de una ‘Certificación de Excelencia Empresarial en Logística y Transporte’.
Dicha certificación es, un año después, el sello ‘e’. De hecho, Gobierno y Fundación presentarán el certificado durante el presente 2015, estando Fomento muy interesado en trasladarlo al seno de la Unión Europea, ya que no hay en esta región ningún reconocimiento parecido en el sector de la logística.
De hecho, la Fundación ha llegado a ofrecer a Fomento que haga suyo el sello ‘e’, “nosotros no lo queremos nuestro, solo queremos que el sector cuente con una herramienta que lo impulse”, indica el presidente.
Diferencias con la versión anterior
El antecedente de la certificación, el sello ‘lógica’ estaba dirigido sólo a operadores logísticos, “si bien esto no era suficiente”, teniendo en cuenta las tendencias actuales de externalización y subcontratación que imperan en el mercado, “por lo que decidimos ampliarlo”.
Además, en la nueva versión se han añadido certificados por subsectores independientes o añadidas a la certificación general. Aunque de momento sólo existe la certificación para el subsector B2C, motivado por la revolución que el e-commerce supone para los procesos logísticos, próximamente se añadirán nuevos subsectores relativos a la logística de mercancías peligrosas, la de medicamentos, o la logística del frío, entre otras operaciones específicas.
Precisamente, la introducción de Adigital, asociación que integra más de 3.000 retails on-line, viene motivada por la expecialización del sello en e-commerce. “Este es un mercado nuevo, y hay que poner unas bases, en las que el sello puede marcar un camino a seguir, evitando el intrusismo así como los problemas derivados de una carencia de control ante un nuevo mercado en boga”.
Otras novedades con respecto al sello ‘lógica’ es que ahora las empresas que cuenten con otras certificaciones, como las ISO, no serán revisadas para el sello ‘e’ en los principios que correspondan a dichas certificaciones ya que “no tiene sentido duplicar trabajo”, dando por hecho que la excelencia está corroborada y aligerando los procesos.
En cuanto a la duración de las certificaciones, estas se otorgan por un plazo de tres años, con una revisión anual. En estos procesos es importante que las empresas informen a la Fundación con antelación de los cambios en su cadena de suministro, si los hubiese, ya que esto ayuda a aligerar las renovaciones y revisiones de forma considerable.