El muelle de Reparaciones de Bouzas del puerto de Vigo ha acogido esta semana una operativa de embarque de tres grandes piezasde un molino industrial fabricadas por Citic Censa.
Con 120 toneladas cada una, estas piezas han sido embarcadas a bordo del “Condor Valparaiso” y han zarpado con rumbo a Chile, donde formarán parte de un molino industrial de minería.
La Autoridad Portuaria de Vigo constata que este tipo de tráficos se ha incrementado exponencialmente en los últimos meses, incluyendo una compleja operativa desde Porriño hasta el recinto olívico llevada a cabo la semana pasada.
Solo en lo que va de año, han sido cerca de medio centenar los transportes especiales que han utilizado la Avenida de Orillamar para llegar a su destino. La mayor parte, un total de 27, se han visto obligados a recorrer la Calle Coruña para enlazar después con esta avenida, principal arteria que vertebra el Puerto de Vigo, rumbo a Bouzas por la zona de los astilleros, hasta alcanzar su destino final en el muelle de Reparaciones o en la terminal de carga rodada como ha sucedido con estas tres grandes piezas cilíndricas.
A estos 27 transportes especiales hay que sumarles otros 21 que han tomado el sentido contrario, como es el caso de 34 vigas de entre 40 y 60 toneladas cada una fabricadas por el Grupo Dizmar, que se embarcaron la semana pasada en el muelle del Arenal con destino a la ciudad canadiense de Montreal, donde formarán parte del proyecto de reconstrucción del puente de Île-aux-Tourtes.
La mayor parte de las piezas que transportan estos camiones proceden de empresas gallegas como Citic Censa y Dizmar.