El puerto de Santander ha celebrado esta semana la llegada del coche nueve millones al enclave, que se ha convertido enreferente del tráfico de vehículos en la fachada atlántica española.
Alcanzado este hito, ahora la Autoridad Portuaria de Santander centra sus esfuerzos enencontrar soluciones al espacio limitado existente en el recinto apostando por la sincromodalidad, el impulso al ferrocarril y por el aumento de la capacidad de sus infraestructuras con inversiones como el silo de automóviles, cuya ampliación comenzará este verano, el nuevo muelle de Raos 9 o la rampa en el muelle de Raos 7-8.
El puerto cerró el pasado 2023 con 342.201 unidades manipuladas, un 18% anual más, con un peso creciente de la importación, que con 133.072 unidades experimentó un crecimiento del 28% en comparación al año precedente, mientras que, al mismo tiempo, la exportación, por su parte, con 208.949 vehículos registró una mejora del 13%, con respecto a las cifras del año 2022.
En septiembre de 1986, por primera vez, un buque car-carrier realizó una operativa de coches nuevos en el muelle de Raos 7 y, para ello, se utilizó una rampa diseñada especialmente para mover los primeros vehículos llegados entonces, unas 399 unidades de la marca Lada, desembarcadas en el buque “Yuriy Avot”, procedentes de la extinta Unión Soviética.