Tras un proceso de análisis de sus instalaciones fronterizas de control de mercancías iniciado en octubre de 2017, la Autoridad Portuaria de Meilla ha recibido una única oferta para ejecutar trabajos de mejora en dichas instalaciones.
En concreto, tras análisis de diferentes alternativas para determinar la distribución en planta más acorde con los espacios disponibles y las necesidades del puerto de Melilla, con estos trabajos se pretende ampliar las instalaciones fronterizas de control de mercancías ubicadas en una parte del tinglado número cinco del muelle espigón de la rada en una superficie de 59,60 m2 en relación con las instalaciones previas, con lo que se pasa de una superficie útil de 109,35 m2 a 169,35 m2.
De manera particular, el complejo se dividirá en diferentes áreas destinadas a usos específicos como son distribuidor, vestuarios, sala de inspección, sala de presentación de la mercancía y dos salas de almacenamiento.
Así pues, los trabajos a acometer comprenden la demolición de las actuales instalaciones, la instalación de solera interior y exterior, así como los diferentes trabajos de cosntrucción para ramas de acceso, muelles de carga, estructuras metálicas, albañilería, electricidad, iluminación, instalaciones de datos y contraincendios.
En este sentido, la única propuesta que ha concurrido al expediente ha sido la que ha presentado la melillense Doranjo, fundada en el año 2000 y especializada en la construcción y rehabilitación de edificios y en proyectos de obra civil, por un importe de 437.800 euros y que ha sido propuesta para su adjudicación por el ente gestor portuario melillense.