El consejo de administración de la Autoridad Portuaria de Barcelona ha iniciado esta misma semana el procedimiento de licitación del contrato para la construcción de los muelles en que se ubicará la nueva terminal de ferries en el muelle Adosado.
Los responsables del enclave catalán estiman que las obras de esta terminal, que dará servicio tanto a tráfico de carga rodada como de pasaje, culminará la construcción de los espacios disponibles actualmente en el muelle Adosado, que está dedicado principalmente al tráfico de pasajeros.
En concreto, el proyecto contempla tres nuevos muelles, uno anexo al canal principal con doce metros de calado y dos muelles más de 8,5 metros de calado. Así pues, el primero estará oblicuo respecto al dique, mientras que el segundo se dispondrá en paralelo al mismo, alineado con el muelle del servicio marítimo de la Guardia Civil.
De esta manera, la futura terminal contará con cuatro puntos de amarre y sus respectivas rampas para la carga y descarga de vehículos, en los últimos 58 metros del muelle ya construido en el extremo sur de la última fase de ampliación del muelle Adosado.
Junto con el muro y la cimentación de los muelles, el proyecto también incluye la superestructura y el equipamiento portuario, sí como el relleno y la consolidación del material para generar las explanadas donde en el futuro se ubicará la terminal.
De igual modo, la licitación incluye la superestructura que dará continuidad a este nuevo muelle con el ya existente, así como el vial de acceso. La licitación, que deberá recibir el visto bueno del Consejo de Ministros, cuenta con un presupuesto de 60,8 millones de euros y un plazo de ejecución de las obras de cuatro años y tres meses.
La terminal se convertirá en la tercera del enclave para tráficos de carga rodada y pasaje.