Entre los meses de enero y noviembre de 2024, las exportaciones marítimas rusas de graneles sólidos han disminuido un 5%, impulsadas por un descenso del 10% interanual en los envíos de carbón, según datos de Bimco.
Además, la competitividad de los precios del carbón ruso ha descendido en comparación con los cargamentos de Mongolia, Indonesia y Australia, y el aumento gradual de las exportaciones por tierra a China también ha contribuido al descenso.
Cabe apuntar que los envíos de trigo y fertilizantes desde Rusia han aumentado un 6% y un 7%, respectivamente. Después del carbón, son los principales productos de exportación del país y, por tanto, han mitigado en parte el retroceso del carbón.
La producción de trigo ha caído un 11% este año, pero las exportaciones se han visto fortalecidas por la cosecha anterior. Por su parte, los envíos de trigo ruso han crecido considerablemente desde 2022 debido a las grandes cosechas de 2022 y 2023.
No obstante, es probable que la competitividad de los precios del carbón ruso siga empeorando, ya que los ferrocarriles rusos han visto aumentar sus tarifas de flete un 13,8% el 1 de diciembre. Las sanciones han provocado una escasez de piezas de repuesto, lo que hace la logística ferroviaria más difícil y costosa, y como Rusia depende de sus ferrocarriles para transportar el carbón a los puertos, la situación afecta a los precios de exportación.
Además de las débiles perspectivas del carbón, es posible que los envíos de trigo ruso también disminuyan en breve, pues la inflación de los precios de los alimentos alcanzó el 9% en octubre. Esto ha llevado al Gobierno a aumentar los aranceles a la exportación de trigo en un 18% a partir del 4 de diciembre y a aplicar una cuota de exportación un 62% menor entre el 15 de febrero y el 30 de junio de 2025.
Es importante señalar que Rusia suele permitir las exportaciones de trigo sin cuotas entre julio y enero, tras la cosecha de trigo en verano, y luego las restringe el resto del año. Según Bimco, los envíos rusos de graneles sólidos podrían seguir cayendo en el primer semestre de 2025, a medida que empeore la competitividad de los precios del carbón y disminuyan los volúmenes de trigo.
A diferencia del carbón, una disminución de los envíos de trigo podría tener un impacto negativo más notable en el mercado, dado que Rusia es el mayor exportador de trigo del mundo, y es posible que otros países no puedan sustituir totalmente los volúmenes.