La industria de cruceros ha acordado con la Autoridad Portuaria de Barcelona no aprovisionar agua mientras dure la fase de emergencia por sequía en Cataluña, que implicará limitaciones en el consumo de agua en la región.
Desde hace años, el puerto de Barcelona, la comunidad portuaria y la industria de cruceros han desarrollado iniciativas encaminadas a ahorrar agua.
Como resultado, la industria de cruceros ha reducido drásticamente su aprovisionamiento de agua en el enclave.
Según datos de la Autoridad Portuaria, el pasado 2022, los buques de crucero se aprovisionaron de agua en menos del 30% de las escalas, frente al 50% que se registraba en 2017.
Los responsables del recinto barcelonés estiman que ños barcos de crucero representanel 0,09% del consumo de aguade la ciudad de Barcelona.
Pese a todo, en coordinación con la Asociación Internacional de Líneas de Crucero, Clia, el recinto ha acordado que, mientras dure la fase de emergencia por sequía de la Generalitat de Cataluña, las navieras que operan allí solo realizarán aprovisionamiento de agua en caso de emergencia.
Este acuerdo se revocará una vez que la situación vuelva a la normalidad.