Durante la última campaña especial de vigilancia de la DGT centrada en las distracciones y desarrollada entre el 7 y el 13 de octubre pasados, se han controlado un total de 553.651 vehículos que circulaban por carretera y se han realizado 8.283 controles.
En todo ellos, según Tráfico se ha denunciado a 8.548 conductores por realizar acciones que suponen una distracción durante la conducción.
Una vez más, la infracción más numerosa sigue siendo conducir sujetando con la mano el teléfono móvil, con un 42,7% de las denuncias formuladas, un total de 3.687 expedientes y un 10% más que hace un año.
Así mismo, tras la conducción distraída por el teléfono móvil, las infracciones más frecuentes siguen siendo abrocharse el cinturón mientras se conduce, con 524 conductores denunciados, o el uso de cascos o auriculares conectados a aparatos reproductores de sonido, distintos del teléfono móvil, con 393 conductores han sido denunciados.
Además, otras de las acciones más cometidas por implicar una distracción en la conducción son la lectura, con 247 denuncias, la búsqueda de objetos en el interior de los habitáculos, con 178 denuncias, distraerse con otros ocupantes del vehículo, con 107 denuncias, o conducir comiendo, con 90 denuncias.
Junto con todas estas actuaciones concretas, los agentes formularon 1.644 denuncias por otras infracciones que provocaban distracción en la conducción.
Por otro lado, estos controles preventivos han permitido también detectar y sancionar a 785 conductores que, además de haber sido denunciados por cometer una distracción al volante, conducían con tasas de alcohol superiores a la permitida y a 793 que dieron positivo en otras drogas.