Luís Simões desarrolla diversas iniciativas para reducir la huella de carbono de las actividades logísticas de Lactogal.
En este sentido, por un lado, el operador luso ha incorporado al servicio un gigaliner propulsado por combustible HVO que, al aumentar la capacidad de cargar, permite reducir el número de vehículos necesarios y aumentar la eficacia de las operaciones de transporte. De igual modo, el uso de HVO también contribuye a minimizar las emisiones contaminantes de la unidad.
Además, como parte del contrato, Lactogal ha cedido la gestión de su plataforma logística en el municipio portugués de Tocha a Luís Simões, así como los nuevos vehículos se utilizarán para el transporte entre esta unidad y la de Modivas, a 130 kilómetros de distancia.
Por último, la empresa también ha apostado por la implantación del e-CMR con el fin de eliminarel uso del papel y mejorar la trazabilidad y el control de las mercancías.