El Consejo Europeo ha dado el visto bueno esta semana a la desaparición de los controles fronterizos internos terrestres de la Unión Europea que separaban hasta ahora Bulgaria y Rumanía del área económica europea.
De esta manera, ambos países acceden plenamente al área Schengen, después de que el pasado 31 de marzo se levantaran los controles fronterizos marítimos y aéreos entre Rumanía, Bulgaria y el resto de países del espacio Schengen.
Con esta incoroporación el espacio Schengen suma un total de 29 países en los que viven 420 millones de personas. En particular, solo persisten los controles con Chipre, mientras que Irlanda no forma parte de esta área de cooperación de seguridad. Ahora esta medida permite que los dos países del este de Europa accedan plenamente al mercado de transporte de la Unión.
Ya en 2011, la Comisión Europea constató que tanto Bulgaria, como Rumanía cumplían los requisitos para formar parte de la que paso a paso, y desde su constitución en 1985, se ha convertido en la zona de libre tránsito internacional más grande del planeta.