Aunque el servicio fue lanzado por Scania hace ya unos años, el número de camiones conectados de la marca sigue aumentando de forma que a finales de 2018, había más de 360.000 vehículos conectados, entre los que se encuentran el 90% de los que circulan por Europa.
La flota conectada recorre un total de 2.900 millones de kilómetros cada mes, y los datos proporcionados por los dispositivos a bordo permite proporcionar a los clientes servicios personalizados, como los planes flexibles de mantenimiento.
Los clientes ganan así hasta un día más de actividad cada año, incrementando su rentabilidad. En 2018, se han firmado más de 70.000 contratos de este tipo, un 68% más que en 2017.
Se trata de una de las señales de que la conectividad está transformando el transporte pesado. Para los clientes, esto se traduce en una mayor disponibilidad del vehículo y una planificación más inteligente.
Nuevas funcionalidades
Los datos operativos de cada camión se monitorizan para realizar los cambios, por ejemplo del aceite y de los filtros, en el mejor momento, reduciendo el tiempo en el taller.
El volumen de datos generados por los camiones Scania se duplica cada 20 meses, lo que facilita a los ingenieros el diseño de nuevas funcionalidades o la mejora de las existentes, ya que pueden utilizarlos para determinar el desgaste y la durabilidad de los componentes, entre otras cosas.
De este modo, el fabricante está ampliando su gama de servicios y potenciando la seguridad de sus vehículos, así como su impacto medioambiental, facilitando cada vez más el trabajo de los conductores.