Coincidiendo con la conmemoración del Día Marítimo Mundial, promovido por la Organización Marítima Internacional, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha querido reivindicar la labor de los Estados Miembros para prevenir la contaminación de los mares y mejorar la sostenibilidad del transporte marítimo.
El 13% de las emisiones de efecto invernadero en la UE proceden del transporte marítimo. Aunque el porcentaje es menor que el de otros modos de transporte, uno de los objetivos del sector es reducir sus emisiones, por lo que desde principios de año la normativa de la OMI prohíbe a los buques consumir combustibles con contenido de azufre superior al 0,5% en masa.
Ese compromiso se ve reforzado con el respaldo al uso de combustibles alternativos, sobre todo el Gas Natural Licuado, en los buques de bandera española. En la actualidad, en España operan ocho buques adaptados con motor dual para el uso de GNL.
Hasta agosto, las operaciones de suministro de GNL en España se han cuadruplicado y el volumen de suministro casi se ha duplicado, llegando a 86.639 m³. Los puertos de Barcelona, Tenerife y Valencia encabezan el ranking, aunque los de Denia, Málaga, Algeciras, Bilbao o Huelva ya han empezado a realizar operaciones.
Para el próximo año, se prevé que estos puntos incrementen el volumen de suministro, y otros, sobre todo de la cornisa Cantábrica, se incorporen a este mapa.
Por otro lado, las 674 inspecciones a buques nacionales y extranjeros que han llevado a cabo en 2020 los servicios de inspección de la Marina Mercante, con 133 muestreos de combustible para comprobar los niveles de azufre, lo sitúan como uno de los países a la cabeza en este ámbito.
Además, España realiza continuos controles del agua de lastre y los sedimentos de los buques, para prevenir la propagación de especies acuáticas potencialmente invasivas, y desarrolla actuaciones de prevención y control de vertidos operacionales y de descargas ilegales de sentinas, entre otras.