Los agentes de Tráfico de Lugo informarán en carretera a los conductores de camiones y furgonetas sobre la manera de sujetar la carga, además de realizar inspecciones técnicas para detectar posibles irregularidades, según recoge La Voz de Galicia.
En caso de existir alguna anomalía, podrán proponer el vehículo para una revisión extraordinaria en su país de origen o inmovilizarlo para su posterior traslado a un taller.
Asimismo, se creará un fichero para que los agentes puedan comprobar en inspecciones posteriores si los defectos han sido corregidos.
El objetivo de llevar a cabo esta iniciativa es mejorar las condiciones de seguridad de los vehículos comerciales de cara a la entrada en vigor el Real Decreto 563/2017 sobre inspecciones técnicas en 2018, en línea con la Directiva 2014/47/UE.
Según indica esta regulación, los elementos utilizados para la estiba de las cargas deberán estar homologados y no podrán ser elementos naturales, como cuerdas. Las operaciones, por otra parte, deberán realizarse en condiciones que impidan el desplazamiento de la mercancía.
Las deficiencias detectadas se clasificarán como leves, graves y peligrosas, estableciéndose diferentes tipos de sanciones para cada una de ellas.