Razones económicas y ecológicas, así como de imagen y responsabilidad social corporativa ante los clientes, están detrás de la apuesta que cada vez más transportistas europeos hacen por el uso del gas naturalcomo combustible alternativo al gasóleo.
En este sentido, la filial española de Smet ha incorporado diez nuevos Iveco Stralis NP 400 con motores de GNL para realizar servicios en el país, como parte de su apuesta a favor de la integración de soluciones para el transporte de bajo impacto medioambiental y alta rentabilidad.
Este grupo italiano de transporte, que realiza transporte tanto internacional como nacional, ya contaba con vehículos Iveco en su flota, a los que ahora se añaden estas unidades propulsadas por gas natural licuado.
La transalpina Smet cuenta en España con delegaciones tanto en Madrid como en Barcelona, así como en Valencia y Sagunto, dado que es un especialista en la logística de automoción, aunque también toca otros palos del transporte como el de productos alimentarios, bienes de consumo y otros productos industriales.