Tras un buen 2019 con crecimientos tanto en la cuota de mercado de vehículos de más de seis toneladas en Europa, como con incrementos en las ventas de vehículos usados y en servicios postventa, aunque con un ligero retroceso en el volumen de entregas de un 1% anual, Renault Trucks hace frente a la incertidumbre del presente ejercicio con una apuesta decidida por la electrificación.
En este sentido, la marca francesa inicia esta misma semana la producción en serie de sus camiones eléctricos Renault Trucks D y D Wide Z.E. en sus instalaciones de Blainville-sur-Orne, compartiendo línea de producción con otros modelos.
Con este hito, el fabricante galo se prepara, como indica su presidente, Bruno Blin, en la presentación de prensa que ha tenido lugar esta semana en la central de la marca en Lyon, para un futuro marcado por la transformación de la industria automovilística y en un ejercicio lleno de incertidumbres.
Blin estima que la electrificación empieza en las ciudades y afirma que la marca impulsará la incorporación de nuevos modelos eléctricos a su gama, merced a una inversión de 150 millones de euros hasta 2025, que se centrará en incorporar soluciones eléctricas en cada segmento de la gama del fabricante, con el objetivo de alcanzar un 10% de eléctricos en su volumen total de ventas en 2025.
Este cambio radical en la industria obliga a Renault Trucks a ofrecer, como indica su presidente, "algo más que un vehículo", una tendencia que también siguen otros fabricantes de vehículos industriales y que, en el caso de la marca gala, quiere extenderse a elementos clave como la financiación, construcción de infraestructuras de recarga, así como soporte técnico avanzado para sus clientes.
Para poder albergar la fabricación de los modelos eléctricos, la marca ha remodelado su planta de Blainville-sur-Orne para construir el edificio Z.E., dedicado por completo a operaciones técnicas para vehículos eléctricos y que tiene una superficie de 1.800 m².
En este edificio, se llevan a cabo las manipulaciones técnicas anteriores y posteriores al ensamblaje de los Renault Trucks D y D Wide Z.E. y se almacenan los componentes, con áreas con condiciones específicas, como la zona a temperatura controlada para el almacenaje de baterías.