La competencia entre el puerto de Vigo y el portugués de Leixões, continuará aumentando en los próximos años. La instalación lusa, que está arrebatando cada vez más tráficos a los muelles vigueses por su agilidad en el despacho de mercancías, está trabajando en un ambicioso plan para reforzar su competitividad, según El Faro de Vigo.
Así, Portugal invertirá 430 millones de euros hasta 2026 en nuevas infraestructuras, reformas y ampliaciones, incluyendo aportaciones de la administración portuguesa y fondos comunitarios, aunque un total de 240 millones de euros procederán de la financiación privada.
Su objetivo es consolidarse como la puerta de entrada al noroeste peninsular y ganar presencia en el mercado español, incluido el gallego. Por ello, casi el 75% de la inversión, unos 320 millones de euros, se emplearán en la construcción de una nueva terminal de contenedores para duplicar la capacidad del puerto, que podrá acoger 1,5 millones de TEUs.
Además, la nueva infraestructura, a la que se dedicará un total de 123 millones procedentes del sector privado, también permitirá aumentar la productividad cerca de un 40%. Los restantes 197 millones se invertirán en otras instalaciones, como un rompeolas, accesos marítimos y una infraestructura para pesca.
En 2016, el recinto portuario movió un total de 658.672 TEUs, un 5,5% más que el año anterior, mientras que en el mismo período pasaron por Guixar 218.044 TEUs, lo que representa una caída del 2,5%, motivada principalmente por las trabas burocráticas en el Puesto de Inspección Fronteriza, PIF.
La Autoridad Portuaria prevé iniciar el proyecto en 2017 para que esté listo antes de 2026. Así, las obras de la nueva terminal de contenedores empezarán en 2018 y finalizarán en 2025. De hecho, en breve se licitará el estudio de impacto ambiental para el prolongamiento del rompeolas.
Reconversión de la Terminal de Contenedores Sur
Otro proyecto incluido en el plan estratégico es la reconversión de la Terminal de Contenedores Sur, que incrementará un 26% su capacidad para desplazar depósitos y un 12% su productividad. La inversión alcanza en este caso los 43,4 millones de euros, aportados por el sector privado. Se espera que las obras empiecen en 2018 y concluyan en 2019.
Estas nuevas dotaciones permitirán a Leixões superar las limitaciones actuales por falta de calado y recibir buques de mayor tamaño. Actualmente, cuenta con la terminal Norte, con un fondo de 10 metros y capacidad para almacenar 4.000 TEUs, y la Sur, de 12 metros de fondo y capacidad para el almacenaje de 15.000 TEUs. En la nueva, el fondo será de 14 metros.
El plan se completará con una plataforma multimodal logística, cuyas obras comenzaron en 2014 y finalizarán en 2022, y un proyecto para la eficiencia de la terminal de graneles sólidos y alimentarios.
En el primer caso, la inversión asciende a 54,1 millones y permitirá impulsar el tráfico portuario un 19%. La segunda actuación, con una inversión de 12 millones, busca reducir la contaminación que genera la actividad portuaria.
El puerto de Vigo cerró 2016 con cerca de 169.100 viajeros, un 17,5% menos que el anterior, que llegaron en 83 escalas, y prevé un descenso importante en 2017. Mientras, Leixões espera recibir 107 escalas, muy por encima de las 84 anotadas en 2016, aunque los buques que atracan en el puerto luso suelen ser de menor tamaño que los de Vigo y transportan menos pasaje.