En un escenario de crecimiento de los envíos de e-commerce que aprovecha los cambios en los hábitos de consumo que ha introducido la crisis sanitaria, las empresas siguen dándole vueltas a cómo reducir el alto coste de unos envíos que, además, también deben enfrentarse a otros retos como las entregas fallidas o la gestión de las devoluciones.
Una de las principales tendencias para intentar rentabilizar estos envíos se centra en intentar acercar lo máximo posible el stock a los puntos de destino final, con el fin de intentar reducir los desplazamientos y agruparlos.
En este contexto tienen cada vez más sentidos los centros logísticos de proximidad o hubs urbanos que intentan aprovechar instalaciones en el centro de las principales ciudades para hacer el reparto de última milla con vehículos sostenibles, las más de las veces.
Diferentes empresas como Saba o Merlin Properties vienen realizando 'probaturas' con estas instalaciones en España.
Precisamente esta última socimi ha iniciado recientemente un nuevo pilotoen colaboración con el fabricante de vehículos ecológicos de reparto Revoolt para utilizar el aparcamiento del centro comercial barcelonés de Las Arenas para el reparto de última milla.
En esta zona se han instalado puntos de recarga para los vehículos del fabricante, con la intención de analizar si la experiencia puede extenderse a otras instalaciones de Merlin en Barcelona.