Ford ha inaugurado su Centro de Vehículos Eléctricos de Colonia, una planta de producción tecnológicamente avanzada donde se fabricará la nueva generación de vehículos eléctricos de la marca para millones de clientes europeos.
El fabricante ha invertido 2.000 millones de dólares en su histórica planta de Niehl, Colonia, para convertirla en un avanzado centro de electrificación. Se trata, además, de la primera planta de Ford neutra en carbono.
Diseñado para ser altamente eficiente y con 125 hectáreas de extensión, cuenta con una línea de producción totalmente nueva, una zona de ensamblaje de baterías y sistemas de automatización de última generación, lo que permitirá una producción anual de más de 250.000 vehículos eléctricos.
El nuevo Explorer 100% eléctrico será el primer vehículo eléctrico que se produzca en Colonia, al que seguirá un 'crossover' deportivo también 100% eléctrico.
Entre las principales innovaciones, están las aplicaciones digitales que conectan máquinas, vehículos y trabajadores. Además, la implantación de máquinas con autoaprendizaje, los sistemas de transporte autónomos y la gestión del 'Big Data' en tiempo real permiten optimizar la eficiencia de los procesos de producción.
Ford, en este sentido, está dando pasos para apoyar, no sustituir, la excelencia humana, con nuevos robots cognitivos y colaborativos, y soluciones de realidad aumentada que mejorarán la eficiencia y el intercambio de datos con otras plantas.
Por otro lado, para lograr la neutralidad en carbono, reducirá el uso de energía y las emisiones de la planta mediante nuevos procesos, maquinaria y tecnologías. La electricidad y el gas natural necesarios para el funcionamiento de la instalación son neutros en carbono, ya que se trata de electricidad renovable y biometano certificados al 100%.
El calor necesario para calentar las instalaciones y los procesos también es neutro en carbono, ya que el proveedor local compensará las emisiones. En este sentido, el calor lo genera una central eléctrica externa y una planta incineradora de residuos, y se suministra a Ford a través de una red de vapor específica.
El proveedor local de energía tiene previsto reducir sus emisiones operativas por este suministro de calor en aproximadamente un 60% en 2026, y eliminarlas por completo en 2035.