La compañía Offshore Monitoring está realizando pruebas a bordo con su nueva tecnología láser Ladar, que ayuda a los capitanes de los buques a identificar objetos tanto en la superficie del mar, como en las profundidades.
Este sistema anti-colisión puede detectar todo tipo de objetos, como redes de pesca, contenedores o hielo, pero también plásticos y otros restos flotantes. Primero se ha probado en el ferry Color Magic de Color Line en la zona de Escandinavia, concretamente en la ruta Oslo-Kiel, identificándose objetos en el trayecto de ida y verificando qué tipo de objetos eran en el trayecto de vuelta.
La naviera estaba especialmente interesada en los bancos de arena del estrecho de Kattegat, entre Dinamarca y Suecia. Su intención es aprovechar las condiciones del viento y la corriente para reducir la resistencia y el consumo de combustible, lo que a veces implica desviarse del rumbo marcado.
En estas pruebas, se comprobó que el sistema era mejor de lo esperado en la detección de objetos pequeños, pero no tan eficiente como se creía en la detección de objetos metálicos en aguas quietas. La explicación es que las olas causadas por el viento generan movimiento en el agua alrededor del objeto, haciendo más sencilla su detección.
Además, cuando se identificaron objetos sumergidos, la tripulación no siempre pudo determinar exactamente de qué se trataba. Por ello, se han realizado nuevas actuaciones en un buque de pruebas en el Mediterráneo, desplegando objetos de plástico y metal para su identificación con dos sistemas Ladar al mismo tiempo, lo que ha permitido realizar comparativas.
A partir de los resultados obtenidos, la empresa está trabajando en una nueva versión de esta tecnología, que estará disponible a finales de 2020 y podría beneficiar no solamente a navieras, sino también a organizaciones medioambientales que quieran localizar residuos en el mar.