Scania ha presentado una nueva generación de motores Euro 6 V8, disponibles en potencias de 520, 580 o 650 CV, capaces de reducir el consumo de combustible entre un 7% y un 10% para los clientes que conducen camiones más grandes y pesados, o con velocidades medias más altas.
Estas motorizaciones se unen al motor de 730 CV para ofrecer a los clientes la mejor potencia, robustez y productividad y así conseguir el máximo rendimiento en la carretera. Todos contribuyen a lograr una disminución del peso y el consumo, y una mayor disponibilidad.
Asimismo, el fabricante sueco ha tratado de reducir todo lo posible las emisiones de CO2por tonelada, así como el nivel de ruido o los costes de mantenimiento y reparación.
Para ello, se ha reajustado la plataforma del motor de 16 litros modular y se han introducido un sistema de reducción catalítica selectiva, SCR, para el postratamiento de los gases de escape, con un mazclador de AdBlue y una unidad turbo de geometría fija más resistente y ligera.
En esta línea, se han realizado algunas modificaciones, así como un mejor compactado de los elementos, manteniendo una relación armonizada entre el hardware y el software, y obteniendo una mejor calibración. La entrada de aire al motor es ahora más directa y el sistema de distribución de combustible es también más sencillo.
En el motor de 520 CV, el uso de perfiles especiales del árbol de levas para garantizar que las válvulas de admisión permanezcan abiertas un poco más de lo normal durante la fase de compresión significa que el motor recibe menos aire, pudiendo mantener una temperatura de trabajo superior.
Nuevos niveles de emisión
En la mayoría de países de la Unión Europea, la normativa permite la circulación de camiones articulados con una longitud de 16,5 metros y un peso de 40 toneladas. No obstante, ahora se está debatiendo la modificación de estas regulaciones para lograr una disminución del impacto medioambientaly un transporte más rentable.
Por ahora, la nueva generación V8 se está ofertando en una configuración Euro 6, pero está previsto introducir más niveles de emisión conforme progrese el lanzamiento, ya que la experiencia ha determinado que usar camiones más grandes tiene efectos positivos y que las desventajas son mínimas, siempre que el marco normativo se haya diseñado adecuadamente.
Este tipo de motorizaciones garantiza un buen funcionamiento en las condiciones de conducción más exigentes, además de una elevada seguridad operacional, lo que se ve reflejado en el kilometraje y los valores residuales que se pueden alcanzar. No obstante, también son adecuados para las operaciones de transporte convencionales, que constituyen el mercado más amplio en Europa.