Desde este pasado 1 de julio, la Policía Foral de Navarra ya gestiona las competencias en materia de Tráfico y Seguridad Vial en la región.
De este modo, el cuerpo policial autonómico pasa a gestionar una docena de funciones específicas que hasta ahora venía ejerciendo el Estado y que se asumirán de manera gradual, como son la gestión de sanciones, gestión de autoescuelas y centros de reconocimiento de conductores, cursos de reeducación y recuperación de puntos, campañas de educación y formación vial, vigilancia y control de carreteras, pruebas deportivas, autorización de eventos con vehículos históricos, facultad de dictar instrucciones a las policías locales y el cobro de tasas.
Así pues, Navarra podrá regular en un futuro el establecimiento de medidas de vigilancia o las restricciones necesarias en la circulación de vehículos por las vías públicas.
A su vez, el Estado se reservala regulación en materia de tráfico, circulación de vehículos a motor y seguridad vial, la expedición y revisión de los permisos y licencias para conducir vehículos a motor y ciclomotores y de la autorización especial para conducir vehículos que transporten mercancías peligrosas y el canje de los permisos de conducción y de la autorización especial para conducir vehículos que transporten mercancías peligrosas expedidos en el ámbito militar y policial por los correspondientes en el ámbito civil, así como el canje, la inscripción o la renovación de los permisos expedidos en el extranjero.
De igual manera, también se conservará potestad sobre la matriculación y expedición de los permisos de circulación de los vehículos a motor, las autorizaciones o permisos temporales y provisionales para la circulación de vehículosy los registros de vehículos, de conductores e infractores, de profesionales de la enseñanza de la conducción, de centros de formación de conductores, de los centros de reconocimiento destinados a verificar las aptitudes psicofísicas de los conductores y de manipulación de placas de matrícula.