Mercadona lleva desde el mes de junio probando la tecnología de refrigeración autónoma de BiofreshTech en un vehículo de su flota de reparto de pedidos 'on-line' en Valencia. Una vez finalizado el periodo de prueba, se ha constatado una reducción del 85% de las emisiones de CO2.
En las condiciones de temperatura y humedad más severas del año, se ha constatado que el sistema de acumulación térmica mantenía estable la temperaturade los compartimentos de congelado y refrigerado durante las 16 horas de reparto.
El sistema funciona con total independencia del motor del vehículo, garantizando la cadena de frío y la estabilidad térmica de los productos durante las paradas y las consiguientes aperturas de puertas. Además, se consigue un ahorro económico del 28% derivado del menor uso de combustible, y por tanto, una reducción de 2,5 toneladas de CO2 anual por cada furgoneta.
Al mismo tiempo, la realización de estas pruebas ha servido a BriofreshTech para llevar su tecnología a un contexto de máxima exigencia térmica, técnica y operativamente, para poder ajustar el diseño final del producto según los requerimientos de Mercadona.