La Comunidad de Madrid, a través del Instituto Madrileño de Estudios Avanzados en Energía, Imdea, encabeza el proyecto europeo Oleoferm, que busca reducir las emisiones de gases contaminantes a través de la producción de aceites microbianos mediante residuos alimentarios.
Se considera que estos aceites pueden ser una buena alternativa para reemplazar al petróleo en la producción de químicos y combustibles. Sin embargo, no ha sido suficientemente explorada hasta el momento.
La intención es someter a los residuos orgánicos, como los alimentarios, a la fermentación anaeróbica, para su transformación en ácidos grasos volátiles. Estos serán consumidos por levaduras en una segunda etapa para producir los mencionados aceites.
La combinación secuencial de ambos procesos biológicos consigue convertir los residuos en compuestos químicos de valor añadido.
Además, este sistema proporciona beneficios medioambientales respecto a la producción de derivados petroquímicos, y podría reducir los impactos del uso de derivados de aceites vegetales sobre la atmosfera.
En este sentido, se trabaja con la premisa de que puede contribuir a reducir las emisiones en la producción y procesamiento, lo cual será verificado cuantitativamente durante el tiempo que dure el proyecto.
Con un plazo de 36 meses, ha sido seleccionado para recibir financiación de la iniciativa Eranet CoBioTech dentro del programa Horizonte 2020.
Cuenta con la participación de Imdea, la Universidad Clermont-Auvergne, Biovalo, el Instituto Jožef Stefan de Ciencias Moleculares y Biomédicas, y la Universidad eslovena de Ljubljana, cuenta con un plazo de 36 meses.