Tras la muerte de un conductor de coche en el tramo de las Tierras del Ebro en la N-340, la Federación Empresarial de Transporte de Tarragona (Feat), perteneciente a CETM, ha calificado de "inaceptable" que "algunos pretendan convertir a los transportistas de víctimas a verdugos".
Así, ha sostenido que son los transportistas "los primeros que sufrimos los peligros asociados a la circulación" y ha insistido en el interés por parte del colectivo de que las carreteras y el tráfico "sean seguros y fluidos".
Por ello, la federación ha solicitado a las administraciones que ejecuten la conversión de la N-340 en A-7 "con carácter urgente", y que, como medida transitoria, sea acordado con la concesionaria de la autopista el paso gratuito de los camiones por este tramo.
"Los transportistas no podemos aceptar que se obligue a pagar peaje, ni que sea con una bonificación, pues eso supondría el establecimiento de un nuevo impuesto a la actividad. La medida excepcional de prohibirnos la circulación por la N-340 debe ir acompañada del ofrecimiento de una alternativa en las mismas condiciones de uso", se sostiene desde la Feat.
Así, ha recordado que, con cada repostaje de combustible, "más de la mitad del coste son impuestos específicos" creados para pagar la construcción y mantenimiento de la red viaria pública.
En este contexto, ha exigido a tanto al Ministerio de Fomento como a la Consejería de Fomento de la Generalitat de Cataluña que no "no tomen ninguna decisión sin contar con el sector del transporte", tal y como han manifestado en varias ocasiones, como en el caso de la Confederación Catalana de Transportes como del Comité Nacional en Madrid.