Las empresas gallegas dedicadas al transporte de carbón por carretera llevan las protestas que arrancaron el pasado lunes con marchas por toda Galicia a Madrid, adonde han llegado después de partir en caravana desde la localidad lucense de O Corgo, con la intención de llevar su protesta frente al Ministerio de Fomento, en pleno Paseo de la Castellana.
Con esta marcha, el sector quiere llamar la atención sobre una situación que afecta a un colectivo de más de 200 empresas que, después de haber realizado importantes inversiones en nuevos vehículos menos contaminantes para el abastecimiento de carbón de la central térmica de As Pontes, por importe de más de cinco millones de euros y adaptarse al plan de inversiones diseñado por la compañía energética.
En esta coyuntura, Fegatramer ve un reflejo fiel de "las características actuales en las que se mueve el sector del transporte, un intermediario u operador, que a la hora de los problemas, no aparece, un gran cargador multinacional, al que los transportistas no le importan y unas normativas, que puede que se aprueban con buenas intenciones, pero que al final, muchas veces, en vez de resolver los problemas, ellas mismas los generan, como es el caso".
Además, la asociación empresarial gallega aprovecha también para cargar contra las "condiciones de trabajo cada vez más abusivas por parte de los grandes operadores y cargadores, muchos de ellos internacionales, a los que solo les interesa aumentar la facturación y los beneficios, para los que el último, pero fundamental eslabón, el transportista, no cuenta para nada y es sometido a todo tipo de situaciones de abuso en todos los aspectos de la actividad".