Después del acuerdo aprobado en asamblea por los repartidores autónomos de prensa de Madrid a primeros de mes, la semana pasada se firmaron los nuevos contratos con Boyacá.
La nueva relación contractual durará dos años, frente a los tres que inicialmente se habían previsto, y, al mismo tiempo, incluirá nuevos derechos laborales para el colectivo, así como indemnizaciones para los 90 repartidores que no renovarán voluntariamente sus contratos, frente a los 130 inicialmente previstos por la empresa madrileña.
De este modo se cierra un conflicto que llegó a causar graves enfrentamientos y que dejó a la Comunidad de Madrid sin distribución de publicaciones periódicas durante semanas.
Por otra parte, con la firma de estos contratos, la empresa, que esta misma semana ha llegado a un acuerdo para realizar la distribución de Car a nivel nacional, adapta su estructura de trabajo a la caída de ventas en la prensa escrita y a la reducción de puntos de venta que, como un goteo continuo, se viene produciendo desde varios años, mientras que, al mismo tiempo, los repartidores autónomos obtienen contratos a medio plazo con unas nuevas condiciones pactadas y asumidas.