El Gobierno ha vuelto a incluir una nueva prórroga del régimen de módulos en su proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2023.
Esta es la séptima vez en que se alarga el límite actual de facturación para acogerse a módulos, como recuerda Fenadismer, algo que se justifica a raíz de la crisis económica existente.
Además, para el próximo ejercicio, se propone como novedad establecer una reducción del 10% del rendimiento neto resultante para los autónomos acogidos a módulos y del 7% en gastos deducibles en concepto de provisiones y gastos de difícil justificación para los acogidos a estimación directa, según la patronal.
En 2016se redujo el límite máximo para poder continuar acogido al régimen de módulos en el transporte. Concretamente, quedó establecido una facturación anual máxima de 125.000 euros, siempre que se realice en más de un 50% a empresas o profesionales.
De igual manera, se estableció un régimen transitorio de dos años, de tal manera que al año se aplicaría un nuevo límite inferior de 75.000 euros, que sin embargo no ha llegado nunca a entrar en vigor por las sucesivas prórrogas que se han ido aprobando, lo que ha permitido acogerse al régimen de módulos en los seis últimos años los transportistas que hubieran facturado menos de 125.000 euros en el año anterior.
La existencia del régimen de módulos es una cuestión polémica en el sector del transporte de mercancías por carretera. Mientras los autónomos lo consideran imprescindible para poder mantener su actividad, las empresas lo consideran una ventaja competitiva que, en algunos casos, se llega a considerar un ejemplo de competencia ilegal.