Los negociadores de la estiba pedirán formalmente al Gobierno un marco para poder negociar

Los representantes de los estibadores y Anesco han vuelto a reunirse esta semana en Madrid para constatar que no saben a qué atenerse en su negociación.

11/01/2018 a las 21:40 h
estiba

Pocos avances se producen en la negociación de la estiba, en el marco de un ambiente enrarecido en el que pese a que todos parecen estar de acuerdo en que hay que tirar del carro, con el fin de que la competitividad de los puertos y, por ende, de la economía española no se vea afectada.

En este marco, los representantes de los estibadores se han reunido esta semana en Madrid con miembros de Anescopara analizar la situación y ver posibles soluciones a este impasse que se vive .

Fruto de esta reunión, ha salido la propuesta de enviar cartas a los Ministerios de Fomento, así como al de Empleo y Seguridad Social con el fin de solicitar información clara y fidedigna sobre los términos en que se está redactando el desarrollo reglamentario del Real Decreto que regula las condiciones laborales de los estibadores.

Se reacciona así ante la falta de respuesta de la Administración después de que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia abriera expediente, con la intención de forzar una reacción de los responsables de regular las condiciones laborales de la manipulación portuaria de mercancías.

Negociaciones paralizadas desde hace meses

Además, con esta medida, los interlocutores buscan desbloquear una parálisis que afecta a las negociaciones desde hace meses o, por lo menos, clarificar el terreno sobre el que deben ponerse a buscar acuerdo, pese a que, en este mismo sentido, tanto el expediente abierto por Competencia, como la atención que está prestando la Comisión Europea a todo el proceso, no hacen más que poner una presión adicional sobre un proceso ya complejo de por si.

Desde hace tiempo, existe una voluntad clara de llegar a acuerdos que traigan estabilidad al sistema portuario español y que garanticen la competitividad tanto de los puertos como de la economía española, como demuestra el hecho de que empresas y estibadores tienen abiertos canales de comunicación fluidos.

Sin embargo, parece que todos tendrán que esperar a que el Gobierno dibuje el marco final de la estiba para evitar males mayores, sobre todo en los asuntos de mayor calado como la subrogación o el control del acceso a la formación y las bolsas de contratación.