A medida que va madurando el comercio electrónico, cada vez se toma una conciencia más clara de que el actual sistema de envíos a domicilio podría tener los días contados dada la poca sostenibilidad que muestra, tanto desde un punto de vista medioambiental, como económico.
Precisamente en este último sentido, esta misma semana, el presidente y consejero delegado de Tendam, Jaume Miquel, ha puesto públicamente cifras a esta realidad.
Según ha explicado, "recibir el producto en tienda tiene un coste logístico de 30 céntimos, mientras que llevarlo a la casa de los clientes nos cuesta entre dos y tres euros de media".
De igual modo, Miquel también ha alertado de los peligros que puede tener un mal desarrollo de la integración omnicanal, ya que, aunque los clientes que utilizan diversos canales para comprar consumen un 50%, estos desarrollos pueden implicar unas inversiones que pueden ser difíciles de rentabilizar.
Y en este ámbito, el directivo del grupo textil apunta que el aprovechamiento de las tiendas para el reparto de mercancía del canal del comercio electrónico puede actuar como una solución logística eficiente. En este sentido, destaca la importancia que tiene para las cuentas de su diferentes enseñas el hecho de que un 60% de sus clientes recoja sus pedidos on-line en tienda y que un 75% acuda a los establecimientos de cada enseña para hacer sus devoluciones.