El puerto de Tarragona ha finalizado el primer semestre de 2023 con un movimiento de 16,26 millones de toneladas, con un aumento del 1,2% respecto al mismo período del año anterior.
Este resultado representa el quinto mejor año del amarre, con unos números que se atribuyen principalmente al aumento en cereales, piensos y harinas. De hecho, los sólidos a granel tuvieron un crecimiento destacado del 28,5% en los agroalimentarios.
Tanto es así que el mencionado tráfico de cereales y harinas consolidó junio como el mejor mes en la serie histórica, alcanzando 563.000 toneladas, y un total acumulado de 3,13 millones de toneladas, con un aumento interanual de 5,39 millones de toneladas (de junio a junio), con buenas previsiones para los próximos tres meses.
De hecho, las estimaciones de importadores de cereales señalan un significativo aumento en las necesidades de importación para el mercado español en los próximos dos años.
Así, se espera un incremento del 31% para el período 2022-2023 en comparación con las importaciones reales del período anterior (15,6 millones de toneladas). Aún más notable es la previsión para 2023/24, con un aumento estimado del 65% respecto al período anterior.
En junio también destacan los crecimientos, además del 34,2% en el tráfico de cereales, del 192,1% en el gasoil, y del 334,4% en frutas, hortalizas y legumbres.
Los biocombustibles ocupan el segundo lugar en la serie histórica con 95.000 toneladas, al igual que los siderúrgicos con 339 mil toneladas, superando solo al primer semestre de 2021. Además, estos últimos también alcanzan el segundo mejor mes histórico con 87.000 toneladas movidas durante junio.
El tráfico de automóviles muestra un crecimiento del 40,7% durante el primer semestre, con un total de 126.067 unidades que han pasado por los muelles tarragonenses en lo que va del año, y 20.798 solo en junio, un 20,6% más que en 2022.