Ante la tendencia al alza del número de víctimas en las carreteras en los últimos años, la Dirección General de Tráfico ha empezado a tramitar un proyecto para la modificación del Reglamento General de Circulación con el fin de reducir la velocidad en las carreteras convencionales.
En estas vías tienen lugar en torno al 75% de los accidentes con víctimas, y resulta destacable el hecho de que uno de cada cinco sean debidos a una velocidad inadecuada. Por ello, se pretende unificar la velocidad máxima en todas las carreteras convencionales para los turismos y motocicletas, el tipo de vehículos en los que se ha centrado la accidentalidad recientemente.
Frente a los límites máximos actuales de 100 km/h o 90 km/h en función de la anchura de la vía, el proyecto contempla reducir todos a 90 km/h para todas las vías que no sean autopistas y autovías.
Por contra, para los camiones, furgonetas y autobuses se prevé la eliminación del actual límite de velocidad máxima de 70 km/h en las carreteras cuyo arcén sea inferior a 1,50 metros. De este modo, quedará unificada a 80 km/h en todas las carreteras convencionales.