Los más de tres millones de autónomos existentes en España tienen la obligación de comunicar a la Tesosería General de la Seguridad Social antes del 31 de octubre próximo sus rendimientos netos totales obtenidos en el año anterior.
De esta manera, se podrá calcular y regularizar la cuota definitiva real que le corresponde cotizar al régimen especial de trabajadores autónomos en función de sus ingresos, tras la entrada en vigor el pasado mes de enero del actual sistema de cotización en función de los ingresos reales de cada trabajador por cuenta propia, en lugar de la anterior regulación basada en la mera elección de las bases de cotización, como informa Fenadismer.
Para ello la reforma establece que en los próximos tres años se aplicará progresivamente un sistema de quince tramosque determina las bases de cotización y las cuotas que le corresponde a cada autónomo en función de sus rendimientos netos, como transición al modelo definitivo de cotizaciones por ingresos reales que se producirá como muy tarde en nueve años.
Según la organización, se estima que alrededor de dos tercios de los autónomos pagaran menos de lo que venían asumiendo hasta ahora con sus cuotas por no ajustarse a su realidad económica.