La facturación de hipermercados, supermercados, autoservicios y establecimientos 'cash&carry' en la Península Ibérica se ha situado en 98.290 millones de euros en 2014, un 0,3% menos que en el ejercicio anterior, en un marco de debilidad de los precios y la fuerte competencia entre los operadores del sector, según el Observatorio Sectorial DBK.
Las ventas en España han disminuido un 0,4%, situándose en 83.900 millones de euros, mientras que en Portugal se ha registrado una caída del 0,1%, hasta los 14.390 millones.
No obstante, las condiciones del mercado han mejorado en 2015, estimándose para el cierre de este ejercicio un repunte del volumen de negocio sectorial, hasta alcanzar en el global del mercado ibérico una cifra ligeramente por encima de los 99.800 millones de euros.
En España se prevé que el valor del mercado alcance algo más de 85.100 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 1,5%, mientras que en Portugal podría registrarse un incremento del 2%.
Mayor penetración del e-commerce
En los próximos años se acentuará el desarrollo de nuevos canales de comunicación en Internet, así como una cada vez mayor penetración del comercio electrónico y una ampliación de la gama de productos y servicios ofrecidos.
En este contexto, la mejora de la oferta de productos frescosconstituye una de las principales líneas estratégicas de los operadores a corto y medio plazo.
Además, cabe esperar un aumento de la inversión en ampliación de las redes de puntos de venta por parte de las grandes cadenas, especialmente en formatos de proximidad, así como un mayor protagonismo de los establecimientos franquiciados.
Por otro lado, a corto y medio plazo continuará el proceso de concentración empresarial, tanto en España como en Portugal, reforzado con nuevas operaciones de adquisición de empresas y establecimientos por parte de los grupos de mayor tamaño.