El interés de Bridgestone y Campofrío por instalarse en el Centro de Transportes de Burgos ha obligado a acelerar las obras de ampliación para tener todo listo para su llegada, por lo que desde el Ayuntamiento prevén que el proyecto pueda licitarse en marzo de 2018, según indica El Correo de Burgos.
A partir de ahí, en la segunda mitad del año se iniciarían las actuacionespara la construcción del vial de acceso a los más de 200.000 m² de ampliación donde se ubicarían estas compañías, que probablemente iniciarían el próximo año los trámites para obtener la licencia de actividad.
El plazo de ejecución será de un año como máximo, con un presupuesto de 9,5 millones de euros que asumirán a partes iguales el consistorio, la Junta de Castilla y León y Cetabsa, la sociedad público-privada que gestiona el enclave.
En concreto, se contempla la ejecución de un vial con dos tramos diferenciados, el primero de ellos desde la glorieta de acceso al Puerto Seco hasta la segunda que está proyectado, consta de dos calzadas de ocho metros de anchura con dos carriles cada una. Se reservará un espacio para el aparcamiento en línea con una anchura de 2,5 metros.
El segundo cuenta con una única calzada de ocho metros con doble sentido. Este vial rodeará el terreno de ampliación y lo separará del área de reserva aeroportuaria, de 275.000 m², anexa al aeropuerto de Villafría.
En el caso de Bridgestone, la multinacional pretende invertir 112 millones de euros en cuatro anualidades en Burgos dentro de un nuevo Plan Estratégico entre 2018 y 2022, mientras que Campofrío se habría fijado en el Centro de Transportes por su cercanía al polígono Burgos Este, donde cuenta con otras instalaciones.