La Federación de Asociaciones de Farmacias de Cataluña ha presentado este mismo mes de mayo una denuncia ante la Consejería catalana de Salud para evitar que Glovo siga realizando "servicio de compra, recogida y entrega de medicamentos a domicilio".
La organización se remite a una resolución de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios de junio del año pasado en la que ya se prohibía a Glovo la realización de venta de medicamentos a través de su plataforma, así como la retirada de la sección de farmacia de su aplicación móvil, que ya es firme, dado que el recurso presentado por la plataforma electrónica, se desestimó el pasado mes de julio.
Pese a todos estos antecedentes, la Federación de Asociaciones de Farmacias de Cataluña acredita, mediante la adquisición de un pedido de ibuprofeno de 600 mg a través de la app de la plataforma, realizada en fechas posteriores a la resolución de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, que Glovo habría seguido vendiendo estos productos sin el permiso de la autoridad competente, cuando, según la institución, la venta por comercio electrónico de medicamentos también cuenta con una regulación restrictiva.
Esta situación pone sobre la mesa los limitaciones del comercio electrónico y el choque que se puede producir en relación con la venta a través del canal on-line de ciertos productos con mercados regulados.