Tres meses después de la entrada en vigor de la Ley Macron, que establece una nueva regulación sobre el salario mínimo para camioneros extranjeros que circulen por suelo francés, resulta necesario recordar algunos de los puntos principales de esta nueva legislación.
En primer lugar, es importante aclarar que el salario mínimo legal (SMIC) está estipulado entre 9,73 y 10 euros bruto/hora para viajes de cabotaje y rutas transfronterizas cuyo inicio o destino tenga lugar en Francia.
La remuneración concreta dependerá del peso del vehículo y de la cualificación del conductor. En cuanto a los viajes en tránsito, no están afectados por esta regulación, que sólo se aplica en caso de llevar a cabo lugar alguna carga o descarga de mercancías en el país.
Por otra parte, la ley indica que el conductor debe llevar consigo un certificado del empleador, así como una copia del contrato de trabajo, aunque no es necesario que esté traducida. También se debe citar un representante en Francia como persona de contacto.
El país galo ha anunciado sanciones desde los 1.500 euros para los operadores que no cumplan con el salario mínimo, así como para los contratantes del servicio que lo incumplan.
Se trata de una normativa que ha motivado múltiples protestas entre las asociaciones de transporte y los sindicatos de varios países. De hecho, los ministros de transportes de 11 estados miembros han manifestado su rechazo a la ley en una declaración conjunta.
Por el momento, las autoridades europeas en Bruselas, que consideran que esta legislación supone una limitación al movimiento libre de mercancías, han iniciado un procedimiento para evaluar las consecuencias que podría tener.