2030 marca la frontera en que la inteligencia artificial empezará a tener un impacto de relevancia en el sector de la logística y el transporte en España, según revela un estudio dado a conocer recientemente por PwC.
El trabajo afirma que la robotización se convertirá en un proceso incipiente a partir de la próxima década, que irá ganando presencia en los próximos diez años y que empezará a tener repercusiones de calado sobre el empleo y la competitividad empresarial a partir de 2030.
PwC estima que un 3% de los empleos podrían estar en riesgo por la automatización hacia 2020, porcentaje que aumentará hasta el 21% a mediados de esa década y que subirá hasta el 34% a partir de 2030, merced a una progresiva implantación de robots y autómatas en tres fases.
De igual modo, el estudio revela que este proceso afectará más a los hombres, con un 39%, que a las mujeres, a las que afectará en un 29%, y que, además, tendrá mayor incidencia entre los empleados con un nivel de formación medio, con un 39%, y bajo, que se verán afectados en un 44%.
Por lo que respecta al transporte y la logística, PwC calcula que el sector podría perder un 52% de los puestos de trabajo que existen actualmente, principalmente en las categorías profesionales menos cualificadas y con rutinas específicas fácilmente reemplazables por máquinas, lo que le sitúa como el más afectado por el proceso de automatización que se avecina con fuertes tasas de crecimientos previstas a partir de 2023 y hasta 2035.
Sin embargo, el trabajo también destaca que los viejos puestos de trabajo sean sustituidos por otros de nueva creación y que, al tiempo, la automatización y la inteligencia artificial alcanzarán para 2030 un 14% del PIB mundial.