Las principales ciudades europeas están desarrollando estrategias que les permitan mantener la actividad económica con el mayor respeto al medio ambiente posible, en un contexto en el que los patrones de consumo está cambiando de forma acelerada.
Al mismo tiempo, el crecimiento del comercio electrónico también plantea nuevos retos relacionados con la eficacia y sostenibilidad de la entrega domiciliaria de paquetes en un entorno congestionado y sometido a regulaciones de circulación y acceso cada vez más estrictas.
En este sentido, la ciudad de París desarrolla políticas para luchar contra la contaminación atmosférica y el calentamiento global, al tiempo que garantiza la integración de estos nuevos patrones de consumo en el tejido comercial existente.
Así mismo, las autoridades municipales parisinas trabajan en estrecha colaboración con algunas de los principales empresas de transporte y distribución urbana de mercancías que trabajan en la ciudad para garantizar que el servicio se realiza en condiciones sostenibles desde un punto de vista medioambiental y tiene el menor impacto sobre la circulación en forma de congestión.
Servicios de entregas de proximidad
La Poste, en concreto, estudia la posibilidad de establecer 80 microcentros de distribución en París que, con una superficie de unos cuantos centenares de metros cuadrados cada uno, servirían para dar servicios de entregas de proximidad para paquetería.
Estos pequeños centros, que estarían abiertos las 24 horas del día y darían servicio tanto a clientes privados como a empresas, servirían de base para realizar entregas domiciliarias con gran flexibilidad horaria en un radio de 600 metros.
De igual modo, estos microcentros también estarían a disposición de los comerciantes de cada zona que podrían dejar los pedidos en consignasa disposición de sus clientes en horarios en que los establecimientos permanecen cerrados.
La empresa tiene previsto instalar este nuevo sistema de manera gradual, en función del espacio comercial disponible en París y de acuerdo a la respuesta de la demanda.
Según calcula La Poste, este nuevo sistema reduciría el número de vehículos comercialesque circulan por la ciudad de París, reduciría la congestión, la contaminación acústica y evitaría problemas de aparcamiento.
La Poste entrega 100.000 paquetes al día en el área metropolitana de la capital francesa y calcula que en 2025 este volumen se multiplicará por tres.